
La Cámara de Proveedores de Insumos y Prestadores de Servicios de los Sectores Energético, Minero y Ambiental (CAPPEMA) ha manifestado su preocupación por la contratación de empresas foráneas y monopólicas por parte de Newmont Cerro Negro, una de las mayores operadoras mineras en la Patagonia.
La empresa habría sido señalada por favorecer sistemáticamente a compañías de otras provincias como Mendoza, Córdoba, La Pampa, y Rosario, entre otras. Según CAPPEMA, esta política excluye a las PYMEs locales, que cuentan con la experiencia y las capacidades necesarias para competir en igualdad de condiciones.
A esta problemática se suman las serias irregularidades detectadas en las operaciones de Newmont durante 2024. Entre el 1 y el 26 de octubre, las autoridades llevaron a cabo cinco inspecciones en el yacimiento Cerro Negro, constatando 97 infracciones en normas de seguridad e higiene. Dos incidentes críticos, uno en la planta de producción y otro bajo tierra, estuvieron a punto de causar tragedias.
La falta de control no solo se limita a la seguridad laboral, sino también a los procesos de contratación. CAPPEMA advierte que las licitaciones están direccionadas hacia empresas con fuertes vínculos previos, dejando fuera a los proveedores locales.
Como una de las mayores productoras de oro en la región, Newmont Cerro Negro tiene la responsabilidad de asegurar que su actividad extractiva beneficie a las comunidades locales. Esto incluye la contratación de proveedores santacruceños, el cumplimiento de las normas laborales y la redistribución de la riqueza generada en la provincia.
Para CAPPEMA, es imperativo que las autoridades provinciales y nacionales intervengan para garantizar que las operadoras mineras cumplan con sus compromisos de desarrollo sostenible y justicia económica. Solo así se podrá transformar la riqueza mineral de la Patagonia en un verdadero motor de crecimiento para la región.