
La Cámara Federal de Casación Penal confirmó que el empresario Lázaro Báez deberá continuar cumpliendo su condena unificada de 15 años de prisión en la cárcel federal de Río Gallegos, al rechazar el pedido de su defensa para acceder al beneficio de la prisión domiciliaria.
El fallo, emitido por la Sala IV y firmado por los jueces Gustavo Hornos y Javier Carbajo, con Mariano Borinsky en disidencia, determinó que las condiciones de salud alegadas por la defensa deberán evaluarse conforme a los procedimientos previstos en la ley de ejecución penal, con intervención del Servicio Penitenciario Federal y el Cuerpo Médico Forense.
Báez fue condenado a 10 años de prisión en la causa conocida como “La ruta del dinero K” por lavado de activos, y posteriormente recibió otra condena en la causa “Vialidad” por fraude a la administración pública, junto a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner. Con ambas sentencias acumuladas, la pena total asciende a 15 años.
El juez Carbajo consideró que no correspondía tratar el tema sanitario en esta instancia, mientras que Hornos señaló que no se acreditaron los requisitos legales para otorgar la prisión domiciliaria, de interpretación restrictiva.
En disidencia, Borinsky planteó que Báez —próximo a cumplir 70 años y con problemas de diabetes, asma, hipertensión y afecciones cardíacas— merecía un análisis más exhaustivo de su estado de salud antes de disponer su permanencia en prisión.
Días atrás, la defensa del empresario había denunciado condiciones inhumanas de detención, señalando que se encuentra aislado en una celda pequeña y precaria, con dificultades respiratorias y cardíacas. Sin embargo, la mayoría del tribunal entendió que los controles médicos y judiciales vigentes resultan suficientes para garantizar su integridad.
De esta forma, Lázaro Báez continuará cumpliendo su condena en la unidad penitenciaria de Río Gallegos, bajo supervisión médica y control judicial permanente sobre sus condiciones de detención.